El fin de semana más cerca del día 5 de febrero, las mujeres casadas se convierten en protagonistas de la jornada, con especial importancia de las 4 mayordomas ( dos jóvenes  y dos mayores) que cada año se renuevan y se encargan de preparar toda la fiesta: preparan los bollos, reparten la tajada, queman el pelele,.

La fiesta comienza el viernes con una cena de disfraces. El sábado, el día grande comienza con la recogida de mayordomas para acudir a la misa y la procesión donde sacan a relucir los trajes de segovianas, muchos de ellos herencia de sus antepasadas. A  continuación reparten la tajada y acuden a la comida. Después del baile de la tarde queman el pelele.

El domingo queda reservado a la misa de difuntas.